Baby Shower

El sábado pasado tuve mi primer Baby Shower.
No, no es la primera ducha del bebé, es una reunión, con juegos ( del estilo de una despedida de soltera, pero inocente) que los familiares o amigas le organizan a la madre del niño por nacer.
En este caso la futura mamá era Nelly, una chica del trabajo (divina, que invitó a la recién llegada) y su bebé por nacer, Jorge.



La cita era a las 4 de la tarde, bien al norte de la ciudad, en el estado de méxico ( como si fuera un San Isidro de lejos). A las 3 y media la pasé a buscar a Dulce que venía también con su mamá y partimos rumbo a este lugar que no me acuerdo el nombre. Tomé el Periférico por primera vez (simil General Paz), que estaba bastante cargada de autos y milagrosamente sin perdernos llegamos, pero a las 4.45. Estaban ya algunas chicas de la oficina, pero el show estaba lejos de haber empezado.




El barrio, cuyo nombre sigo sin acordarme, era muy tranquilo, muy prolijo y como estaba subiendo una cuesta bastate pronunciada tenía una vista panorámica (muy linda) de toda la ciudad.
El lugar era un jardín con toldo y unas mesas. La gente estaba vestida bastante paqueta, estaban las amigas y familia, incluidos hermanos, padres y vecinos, y había una mesa llena de regalos que iban dejando los invitados.

Los juegos empezaron a eso de las 5 y media, paso a relatar:
- escribir nombres de varón que empezaran con J
- dígalo con mímica
- intentar adivinar cuánto papel higiénico medía la panza de la futura madre
- ponerle el biberón al bebé ( en vez de la cola al burro)
- con los ojos vendados darle de comer a otra persona que también tenía los ojos vendados ( en este me tocó participar...no pude decir que no).



Nos fuimos a las 7 y media, souvenir incluido, cuando faltaba la última parte, un poco más emotiva, de leerle algunas cosas que habíamos escrito para la madre y el niño y cuando estaba por llegar la comida ( que parecía muy casera, muy rica y muy abundante!!!).
Se estaba haciendo de noche, yo tenía una cena y bastante frío, por lo que ya era hora de partir.

La verdad es que la pasé bien, me divertí con las chicas, conociéndolas un poco fuera del ámbito laboral y experimenté la novedosa sensación de THE BABY SHOWER EXPERIENCE, je je.