viernes, 10 de octubre de 2008

Crónicas Porteñas

La primera semana en Buenos Aires transcurrió bàsicamente entre primeros encuentros, virus resfriales, mucho madre y padre, cumpleaños encuevado y cenas con gordos.

A partir del segundo viernes, los festejos cumpleañiles ganan lugar y fuerza emocional y los ánimos -alicaídos hasta entonces- se revierten dramáticamente.

Lo más destacable algunos encuentros amiguísticos y familiares cuyo testimonio fotográfico querría compartir.
Humildes, pero lleno de cariño.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Me encantaron las fotos !!!

Mária dijo...

las sacó el hombre invisible....mmmm, malo malo