miércoles, 26 de noviembre de 2014

¿Qué harías si no tuvieras miedo?

Ayer me interpeló un grafiti por la calle y me hizo pensar durante todo el camino de vuelta a casa.
La propuesta, escrita con un simple fibrón sobre un cartel publicitario, me pareció brillante. Si uno es capaz de descubrir qué es lo que está dejando de hacer por miedo, a vencerlo entonces y a hacerlo. El enemigo visible es menos temible que el que acecha en las sombras. Identificar el miedo. Reconocer las ataduras. Sacudir las excusas.

Lo primero que se me pasó por la cabeza fue: arriesgaría más.
Pero  ¿es una respuesta honesta? ¿no es esa la respuesta que daríamos todos? hay que ser más específico ¿qué arriesgaría? ¿dinero, oportunidades, tiempo, afectos?
¿no habría que ir un paso para atrás e identificar antes cuáles son mis miedos, cuáles los superficiales, cuáles los profundos y en qué medida me condicionan?

No me resulta fácil serme sincera y como no pude llegar al fondo del asunto lo dejo acá grabado, para no olvidarme de seguir mirando para adentro.

¿qué haría si no tuviera miedo?

miércoles, 22 de enero de 2014

Oda a las cosas rotas

Se van rompiendo cosas 
en la casa 
como empujadas por un invisible 
quebrador voluntario: 
no son las manos mías, 
ni las tuyas, 
no fueron las muchachas 
de uña dura 
y pasos de planeta: 
no fue nada ni nadie, 
no fue el viento, 
no fue el anaranjado mediodía, 
ni la noche terrestre, 
no fue ni la nariz ni el codo, 
la creciente cadera, 
el tobillo, 
ni el aire: 
se quebró el plato, se cayó la lámpara, 
se derrumbaron todos los floreros 
uno por uno, aquél 
en pleno octubre 
colmado de escarlata, 
fatigado por todas las violetas, 
y otro vacío 
rodó, rodó, rodó 
por el invierno 
hasta ser sólo harina 
de florero, 
recuerdo roto, polvo luminoso. 

Y aquel reloj 

cuyo sonido 
era 
la voz de nuestras vidas, 
el secreto 
hilo 
de las semanas, 
que una a una 
ataba tantas horas 
a la miel, al silencio, 
a tantos nacimientos y trabajos, 
aquel reloj también 
cayó y vibraron 
entre los vidrios rotos 
sus delicadas vísceras azules, 
su largo corazón 
desenrollado. 

La vida va moliendo 

vidrios, gastando ropas, 
haciendo añicos, 
triturando 
formas, 
y lo que dura con el tiempo es como 
isla o nave en el mar, 
perecedero, 
rodeado por los frágiles peligros, 
por implacables aguas y amenazas. 

Pongamos todo de una vez, relojes, 

platos, copas talladas por el frío, 
en un saco y llevemos 
al mar nuestros tesoros: 
que se derrumben nuestras posesiones 
en un solo alarmante quebradero, 
que suene como un río 
lo que se quiebra 
y que el mar reconstruya 
con su largo trabajo de mareas 
tantas cosas inútiles 
que nadie rompe 
pero se rompieron
De" Navegaciones y Regresos"
Pablo Neruda

Que no se corte

Hace unos 20 meses había empezado esta entrada, con la buena excusa que mi buena amiga gabriela me había dado en su blog, El toro por las astas, para continuar con este blog.

He aquí la buena excusa.
Los premios Liebster.
Cito:
"Los Premios Liebster (en alemán “favorito”) son una interesante iniciativa destinada a promocionar “pequeños blogs”, en cuanto al número de visitas, a través de una cadena de premios simbólicos que los propios bloggers otorgan. La idea de estas menciones es llamar la atención sobre blogs interesantes que no tienen, a veces, mucha repercusión y pasan desapercibidos para el gran público. La forma de hacerlo es muy curiosa ya que quienes reciben una mención deben realizar una tarea: Es decir, cada blogger que recibe el premio en reconocimiento a su blog, debe, a su vez, otorgar un nombramiento igual a otros 5 blogs de su elección. Sólo se deben cumplir unas simples normas:
Copiar y pegar el premio en el blog enlazándolo con el blogger que se lo ha otorgado.
Premiar a tus 5 blogs favoritos con la condición de que tengan menos de 200 seguidores y dejarles un comentario en sus entradas para notificarles que han ganado el premio.
Confiar en que continúen la cadena premiando a su vez a sus 5 blogs preferidos”.

Y yo corté la cadena.
En el fondo creo que porque me daba un poco de vergüencita la parte de notificar a los elegidos, especialmente cuando no los conocía personalmente.
Sin embargo, me quedó una especie de culpa, que vengo a redimir en este día, de una manera sui generis (porque son sólo 3, porque no tengo idea de cuántos seguidores tienen y porque nunca se van a enterar de que fueron reconocidos)

Y mis Premios Liebster van para:

1) Miss Gadget: historias, poemas y relatos de una poetisa porteña actualmente radicada en el exterior. Amo sus reflexiones encadenadas con recuerdos, sin filtro, ni pausa. Deliciosa.
http://missgadget.blogspot.com.ar

2) Ankle Sprain: relatos de la vida cotidiana de una argentina, ingeniera de profesión y polirubro de alma, madre de dos hijos, viviendo en el desierto israelí. Adictivo.
http://wandawolf.blogspot.com.ar

3) Andanzas: diario de viajes, recomendaciones y fotos, amenizados con relatos,  de un viajero empedernido. Ideal para quienes tienen la fortuna de planificar un viaje.
http://efivern.blogspot.com.ar