Primera Despedida...

Y es así no más, se va desmembrando la familia, los hijos ya son grandes y dejan el hogar....en busca de sus verdaderas familias, je je.

Ayer era la última noche que pasaba Tomás en casa, y por supuesto hicimos cena despedida, en la cual el agasajado tuvo que cocinar, obvio, unas riquísimas pizzas caseras, que comimos con mucho ahínco.

También hubo música, cerveza y hasta una invitada del agasajado. No podía faltar tampoco la guitarra, el ukelele, el rasguña las piedras y el fogón que prendimos en el cuarto de invitados, con las maderas del piso...Cuando llegaron los bomberos tuvimos que suspender la fiesta porque nos mojaron todos y nos ibamos a resfriar.



Evidentemente desde rasguña las piedras en adelante es ficción, pero no me podía detener, je je.

Lo más triste del asunto fue llegar hoy de trabajar, con la ilusión de una noche sola - inacete y pulé tenían recital de quien sabe qué - de pizza y tele...y darme cuenta que la pizza no existía más.
Moraba en los estómagos cuasi filiales.